Mirar de otro modo, crear, generar experiencias... Esto y muchas otras cosas es Recrear la Casa de Campo, una actividad de Land Art con pequeños-grandes artistas. Arte en la Naturaleza y mucha, mucha imaginación...


viernes, 30 de abril de 2010

30 de Abril, enredándonos...



Tirando del extremo, cortando con decisión y corriendo hasta el árbol. Una y otra vez, envolviendo los troncos como si fuesen un regalo de cumpleaños para nuestro mejor amigo, o como si estuviésemos vistiendo a una muñeca de piernas rugosas. De colores, de hojas, de palitos.




Así, con ayuda de las lanas y de nuestra imaginación. Los alumnos y alumnas de 1º de primaria del Colegio General Mola fueron transformando en un bosque viviente, en una cueva de fantasmas o en un original tendedero sus espacios de creación





También combinando las lanas decoraron los pequeños detalles que después iban incorporando, como los palos


o inventaron bonitos puentes para unir los troncos




y hasta una casita con una puerta bien blandita y colorada, el techo color de rosa y una ventana con el paisaje natural incorporado



Pero además, con todos los materiales de la propia Casa de Campo hemos creado lindas propuestas de arte en la naturaleza, como pequeños grandes artistas...





Enredados, al final, con el arte, con los ovillos de nuestras ideas y con la naturaleza


jueves, 29 de abril de 2010

29 de Abril, experimentando en Casa


Nuevos materiales y nuevas experiencias. Exprimiendo cada día nuestra imaginación y las posibilidades que un espacio vivo como la Casa de Campo nos ofrece, vamos inventando nuevas propuestas, reinventando otras y sobre todo aportando infinidad de ejemplos de sobre lo que significa el Land Art.






























Buscamos como darle vida a las piedras, movimiento a las espigas u otra piel a los árboles. Y nos sorprende como las cosas van cambiando de aspecto poco a poco y lo que eran un montón de palos alineados en el suelo va tomando forma y se completa como si fuese un verdadero paisaje





En la zona de arboleda donde trabajamos, los alumnos y alumnas del Colegio Adolfo Suárez, se han montado un artístico huerto, en el que han plantado un montón de semillas de imaginación, para que florezcan pronto!



También en ese estilo "landartero" y "huertero" dejándonos llevar por la verticalidad y la horizontalidad de nuestras construcciones, nos inventamos la historia de un hombrecillo, que volvía paseando por el bosque, y se encontró con una casa, pero que extraño, porque la casa parecía tener un misterio y entonces...




...entonces se convirtió en un hombre gigante, con ojos de chapa y pies de piedra, que había perdido su volumen! y se había vuelto planito planito como la acera de en frente...



Y para acabar, con las espigas rellenamos de buenos sentimientos un lindo corazón y vestimos de la forma más elegante a un señor tronco!





miércoles, 28 de abril de 2010

28 de Abril, con orden y concierto


Así de ordenada y colocadita hemos empezado nuestra jornada de hoy en la Casa de Campo. Todo buen artista del Land Art sabe que una de las cosas más importantes antes de crear la obra es recopilar buenos materiales que nos sirvan para darle vida a nuestra creación, pero también mantener un estudio, en este caso la propia Naturaleza, en armonía donde seamos capaces de acceder a los elementos que necesitamos en un plis plas. Y eso es lo que los alumnos y alumnas de 3º y 4º del Colegio Adolfo Suárez han puesto en práctica nada más empezar.



Y una vez escogidos los materiales y el espacio para la acción, nos ponemos manos a la obra



Además hoy se nos ha ocurrido que un compañero también puede ser una buena pieza para transformar la naturaleza en arte, así que hemos utilizado esta idea para convertir su silueta en un gracioso hombrecillo de espigas




Lo que podía ser una construcción de palos a modo de pirámide, lo hemos rodeado de un buen manojo de espigas y unas cuantas piedras, y con un gracioso toque final de color y contraste nos quedó como un rico pastel!



Y como nos gusta mucho dibujar, hemos hecho un superpaisaje a gran escala sobre el suelo, con un campo florido, un frondoso árbol y una nube juguetona que intentaba, sin conseguirlo, taparnos los rayos del reluciente sol



Un hermano mayor del sol, lo que sería un solazo de esos que hace en veranito...


...una gran espiral de hojas y flores moradas...



...o este lindo cuadro que tanto nos habrá gustado llevar para poner en la pared de nuestra habitación, con una muestra de la variedad de elementos que podemos encontrar en la Casa de Campo si estamos muy atentos.


Utilizando las lanas, hemos atado unos cuantos árboles y como si de abalorios se tratasen, les hemos colgado todo tipo de hatillos y bonitos adornos





Así de originales nos han quedado las obras de hoy que efímeras, únicas e irrepetibles nos han demostrado todo lo que podemos inventar con una pizca de naturaleza y un poquito de imaginación